viernes, 3 de noviembre de 2017

Breve biografia de San Martin de Porres





  1. SAN MARTIN DE PORRES fue un mulato, nacido en Lima, capital del Perú, en el 9 de diciembre de 1579. Era hijo natural del caballero español Juan de Porres (o Porras según algunos) y de Ana Velásquez natural de panamá, Martín heredó los rasgos y el color de la piel de su madre Vivió pobremente hasta los ocho años en compañía de la madre y de una hermanita que nació dos años después.
  2. Estuvo un breve tiempo con su padre en el Ecuador Martín era inteligente y tenía inclinación por ayudar a los enfermos. Había aprendido a curar utilizando yerbas medicinales en la farmacia de su vecino y también aprendió la profesión de barbero.
  3. Fue admitido sólo como "donado", en el Convento de Santo Domingo de Lima y le confiaron los trabajos más humildes de la comunidad. Martín es recordado con la escoba, símbolo de su humilde servicio. Su humildad era tan ejemplar, que se alegraba de las injurias que recibía, incluso alguna vez de parte de otros religiosos dominicos, como uno que, enfermo e irritado, lo trató de perro mulato.
  4. En una ocasión, cuando el convento estaba en situación económica muy apurada, Fray Martín, espontáneamente se ofreció al Padre Prior para ser vendido como esclavo, ya que era mulato, a fin de remediar la situación.
  5. Se le vio repetidas veces en éxtasis y, algún levantado en el aire muy cerca de un gran crucifijo que había en el convento. A él acudían teólogos, obispos y autoridades civiles en busca de consejo. Más de una vez el mismo virrey tuvo que esperar ante su celda porque Martín estaba en éxtasis.
  6. Es enfermero, al mismo tiempo que hortelano herbolario, cultivaba las plantas medicinales de que se valía para sus obras de caridad y también desempeñaba el oficio de distribuidor de las limosnas que algunas veces recogía, en cantidades asombrosas, parte para socorrer a sus propios hermanos en religión y parte para los pobres de toda clase que había en la ciudad. Su amabilidad se extendía hasta los animales.
  7. Sus conocimientos no eran pocos para su época y, cuando asistía a los enfermos, solía decirles: "Yo te curo y Dios te sana". Todas las maravillas en la vida del santo hay que entenderlas asociadas con el profundo amor a Dios y al prójimo que lo caracterizaban.
  8. A los sesenta años, después de haber pasado 45 en religión, Fray Martín se sintió enfermo y claramente dijo que de esa enfermedad moriría. La conmoción en Lima fue general y el mismo virrey, conde de Chichón, se acercó al pobre lecho para besar la mano de aquél que se llamaba a sí mismo perro mulato. Mientras se le rezaba el Credo, Fray Martín, al oír las palabras "Et homo factus est", besando el crucifijo expiró plácidamente.
  9. Murió el 3 de noviembre de 1639. Toda la ciudad acudió a su entierro y los milagros por su intercesión se multiplicaron.
  10. Fue beatificado en 1837 por Gregorio XVI y canonizado el 6 de mayo de 1962 por el Papa Juan XXIII. En 1966 Pablo VI lo proclamó patrono de los peluqueros de Italia, porque en su juventud aprendió el oficio de barbero-cirujano, que luego, al ingresar en la Orden de Predicadores, ejerció ampliamente en favor de los pobres.


   Bendiciones...